El modernismo a través de las sillas de Gaudí
Gaudí fue más que un modelo a seguir en la historia del diseño, se convirtió en un emblema. Su carácter individualista, su exuberancia plástica y su místico simbolismo no son rasgos que hayan favorecido que el diseño contemporáneo lo acepte como referente. Sin embargo, los diseños de Gaudí resultan, todavía hoy, de una extrema originalidad.
Silla de comedor Casa Batlló (1907)
Silla diseñada por Gaudí, fabricada en roble macizo barnizado, para el salón comedor de la Casa Batlló. Si os fijáis bien su diseño reduce la estructura a la mínima expresión y se adapta a las formas del cuerpo humano., desapareciendo las líneas rectas; así se consigue una gran comodidad. Los vacíos circulares situados de lado a lado del respaldo, que podrían hacer pensar en una leve decoración, son unos rebajamientos funcionales que pretenden ayudar a mover la silla en el caso que haya un desplazamiento.
Banco Casa Batlló de dos plazas (1907)
Siguiendo el concepto de la silla de comedor de la Casa Batlló, Gaudí diseñó el banco que por su concepción y color le dan un aspecto peculiar y una pieza única en su género: la idea de dos plazas que incumplen la clásica disposición alineada de un banco biplaza. El apoyabrazos central actúa de divisor, además del cambio de orientación de los asientos, dispuestos en ángulos iguales con respecto al eje central, pero opuestos. También hay que destacar sus tres patas delanteras y únicamente dos posteriores. Gaudí ya buscaba la ergonomías, así lo demuestra la forma del respaldo para dar comodidad al usuario.
La tendencia de Gaudí por las representaciones alegóricas se manifiesta aquí de forma simple, describiendo la realidad íntima humana, en la que las personas, a pesar de compartir el mismo espacio, a menudo se encuentran solas y aisladas.
Silla Casa Calvet Flores (1901)
En 1901 Gaudí diseñó esta silla para la sala de juntas de la Casa Calvet. Fabricada en madera de roble barnizada con un diseño muy elegante se caracteriza su forma trapezoidal que le da un aspecto mucha más esbelta que las sillas tradicionales, utilizando Gaudí geometrías circulares y granos de café encajados en el respaldo. Gaudí pensó en todos los detalles, por lo que en el asiento hizo cincos orificios alineados para evitar que al sentarse se resbalen. De especial interés es el soporte que une el asiento con el respaldo. Si la queréis ver la encontrareis en el Casa Calvet.
Banco Casa Calvet Flores (1901)
Esta pieza se caracteriza por el trabajo de talla ornamental, con un respaldo formado con tres grandes flores rodeadas a su vez por otros tres motivos florales. Destaca el hecho de la unión entre el brazo y el respaldo que es totalmente voladiza. Este elegante banco de 2-3 piezas presidia la sala de juntas de la Casa Calvet. Fabricado en madera de roble barnizado, haciendo juego con las sillas.
Taburete Casa Calvet Flores (1901)
Este taburete en forma de esquina de líneas curvas y suaves, siguiendo la línea de los anteriores, posee un pequeño respaldo que recuerda la fachada posterior de la Casa Calvet. Se caracteriza su sencillez y comodidad. Gaudí diseñó este taburete para que fuera ubicado en una de las esquinas del despacho de dirección de la Casa Calvet.
Sillón Casa Calvet Flores (1901)
Este sillón marca un estilo de transición entre los muebles de la Sala de Juntas de la Casa Calvet y el mobiliario diseñado para las casas Batlló i Milà. Este sillón es más sobrio que los diseñados para la misma casa, no tiene ninguna ornamentación, el asiento de forma circular, formado por cinco piezas encajadas mediante almillas y sin más ayuda que la de la precisión de los ebanistas de aquella época, se une el respaldo mediante un cuello grueso, del que salen los brazos, que acaban en forma de mano arqueada. El respaldo en forma de corazón coincide con el punto de la espalda que corresponde al corazón. Este sillón está en el despacho de gerencia de la Casa Calvet, además de un escritorio y el taburete rinconero.
Banco de iglesia colonia Güell (1914)
Aquí Gaudí utiliza a parte de la madera, el hierro. Un respaldo rectilíneo no se corresponde con el asiento, ideado de modo que el que se sienta en él no pueda conversar con su compañero, ya que los asientos están sensiblemente inclinados hacia los extremos. Así mismo los reclinatorios se pueden levantar para evitar que se ensucien de barro al apoyar los pies en días de lluvia.
En la actualidad se conservan 13 bancos originales, uno de ellos están puesto en la Casa Museo Gaudí del Park Güell.
Para terminar qué más podemos decir, Gaudí fue un genio para su época.
